Uno de los grandes retos a enfrentar es la desigualdad frente a los países desarrollados, lo que invita a aquellas naciones en vías de crecimiento a reinventarse.
CARLOS DORADO/OBSERVADOR LATINO
Martes 10 de agosto de 2021
La covid-19 trastocó todos los modelos económicos del mundo y las naciones deben redefinir sus estrategias para subsistir a las consecuencias de la pandemia.
Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), desde marzo de 2020 cuando inició la ola masiva de contagios, los Estados invirtieron 16 billones de dólares para contrarrestar los efectos negativos del coronavirus en los sectores productivos, y el ámbito internacional, los bancos centrales ampliaron sus balances por 7,5 billones de dólares.
Los déficits desde la Segunda Guerra Mundial son preocupantes hasta el punto que en solo un año, las entidades financieras debieron suministrar más liquidez que en lo previsto en una década.
Los análisis del FMI indican que si los gobiernos del mundo no hubiesen actuado de la forma como lo hicieron, la recesión sería la peor después de la Gran Depresión.
Ante esa situación, ¿qué le espera al mundo en los próximos meses o años? Mientras los planes de vacunación avanzan de forma acelerada para luchar contra las olas de contagios, los Estados deben dar una estocada final para controlar las crisis existentes.